ACLARANDO DUDAS SOBRE LAS VACUNAS

¿Por qué debo vacunar a mi hijo?

Porque las vacunas protegen a los niños de enfermedades peligrosas. Estas enfermedades pueden tener complicaciones graves o secuelas y provocar incluso la muerte. Algunos de estos padecimientos son ahora muy poco frecuentes, pero esto es debido precisamente al mantenimiento de las vacunaciones en toda la población.

¿Qué enfermedades evitan las vacunas?

Las vacunas más comúnmente empleadas en nuestro país son las siguientes: hepatitis B, difteria, tétanos, tosferina, polio, Haemophilus influenzae tipo b, meningococo C, neumococo, sarampión, rubeola, parotiditis, varicela, virus del papiloma humano, rotavirus, meningococo B, hepatitis A, gripe y más recientemente la de los meningococos ACWY.

¿Qué calendario le corresponde a mi hijo?

En España cada vez son menos las diferencias de calendario entre las distintas CCAA. En su centro de salud le indicarán la pauta vigente en su comunidad, aunque puede consultarlas en esta app.

¿Qué vacunas son gratuitas y cuáles tendré que comprar en la farmacia?

Todas las vacunas incluídas en el calendario oficial de su comunidad autónoma se administran de forma gratuita. Quedan fuera de este régimen de financiación algunas vacunas como la del rotavirus y la del papiloma humano en varones y en algunas CCAA la del meningococo B (excepto en Canarias y Castilla y León) y la vacuna del meningococo ACWY en lactantes (excepto en Andalucía y Castilla y León). Recuerde siempre llevar receta de la vacuna correspondiente a la farmacia para su compra.

¿Qué debe hacerse en caso de retraso de alguna vacuna?

Lo ideal es cumplir las fechas propuestas por cada CCAA. No obstante, si se ha cambiado de CCAA o se ha olvidado de pedir cita para alguna vacuna coméntelo con su enfermera o pediatra, probablemente no sea demasiado tarde. La mayoría de las vacunas se pueden administrar a cualquier edad y además, si hubiera olvidado alguna dosis no sería necesario empezar de nuevo, ya que las dosis administradas siguen contando, aunque haya pasado más tiempo del aconsejado.

¿Por qué no debo esperar hasta que mi hijo empiece el colegio para ponerle las vacunas?

Las vacunaciones deben empezar a los 2 meses, y en su mayor parte se administran dentro de los dos primeros años de vida. Al vacunar a su hijo a tiempo usted lo protege de infecciones e impide que contagie a otros en la escuela o guardería. Los niños menores de cinco años son especialmente susceptibles a contraer enfermedades porque su sistema inmunológico no ha desarrollado todavía las defensas necesarias para luchar contra las infecciones.

¿Son seguras las vacunas?

Las vacunas son medicamentos muy seguros, pues son sometidas a estudios estrictos antes de poder administrarse a la población y siguen siendo vigiladas incluso una vez comercializadas. No obstante, como todos los medicamentos, pueden producir efectos secundarios que por lo general son muy leves (dolor en el lugar del pinchazo, fiebre, sarpullido…) dependiendo de cada vacuna. Excepcionalmente, una vacuna puede desencadenar reacciones graves en personas alérgicas a ese preparado o con otro tipo de circunstancias especiales.

¿Cuándo está contraindicada la administración de una vacuna?

Raramente está contraindicada una vacuna. Los procesos febriles importantes durante el día previsto para la vacunación pueden aconsejar su retraso, pero la única contraindicación real habitual es la alergia grave conocida a la vacuna o a alguno de sus componentes. Por este motivo es muy importante que se su hijo tiene diagnosticada alguna alergia, lo comunique previamente. Se podrán administrar las vacunas aunque su hijo esté resfriado o esté tomando otras medicinas o pueda estar incubando alguna enfermedad. El contacto con otros niños o con embarazadas o con mujeres que estén amamantando no contraindica nunca la vacunación.

¿Se puede administrar la vacuna triple vírica (SRP) a los niños con alergia a proteínas de huevo?

El estudio en las Unidades de Alergia Pediátrica de los casos, muy infrecuentes, declarados como sospechosos de reacción anafiláctica tras la administración de esta vacuna, no demostró asociación con la sensibilización a antígenos del huevo, sino con otros componentes de la vacuna, como la gelatina o neomicina, por este motivo las recomendaciones actuales son las siguientes:

– SE DEBE ADMINISTRAR LA VACUNA TRIPLE VÍRICA A TODOS LOS NIÑOS CON ALERGIA AL HUEVO, incluso con clínica de anafilaxia tras la ingesta de huevo, en su centro de vacunación habitual.

– En el caso de aquellos niños que hayan tenido una reacción con una dosis previa de vacuna triple vírica, se administrará bajo supervisión de un pediatra alergólogo en un Centro Hospitalario.

¿Se puede vacunar a los niños con alergia a la leche de vaca?

La presencia de derivados lácteos en el contenido de vacunas es un hecho excepcional. En la ficha técnica de las vacunas comercializadas en España no figura que puedan contener proteínas de leche de vaca, aunque puede producirse contaminación inadvertida procedente del medio de cultivo. Algunas vacunas contienen, como excipiente, lactosa, pero está libre de proteínas lácteas. Desde un punto de vista práctico, la vacunación del niño alérgico a leche de vaca es segura.

¿Qué debo hacer si mi hijo tiene una reacción grave?

Si usted piensa que su hijo está experimentando una reacción grave, llame a su médico o al teléfono de emergencias 112 o bien lleve a su hijo al Servicio de Urgencias más cercano inmediatamente.

¿Por qué es importante tener un registro sanitario de vacunas?

Un registro sanitario personal de las vacunaciones le ayuda a usted y a sus responsables sanitarios a administrar las vacunas a tiempo. El registro debe empezar a los 2 meses, cuando recibe las primeras vacunas, y debe ser actualizado cada vez que al niño se le apliquen nuevas dosis. Esta información le será útil si usted se muda de domicilio o cambia de médico. Recuerde completar las vacunas administradas en la app y en las revisiones del niño sano llevar la cartilla de registro.

 

¿Puedo saltarme el calendario de vacunaciones que le corresponde a mi hijo?

Esto es muy importante tenerlo claro. En España tenemos muy pocos casos (de los más bajos del mundo) de enfermedades que sean prevenibles por medio de vacunas, pero esto no quiere decir que estas enfermedades hayan sido erradicadas. Muchos de los virus y bacterias que las producen siguen presentes en nuestro país y por esta razón es importante que los niños, especialmente los bebés y niños pequeños, reciban a tiempo las vacunas recomendadas. Además, en una sociedad con tanta movilidad como la nuestra, cada día llegan personas de otros países o es posible que viajemos nosotros al extranjero, incluyendo países en los que las enfermedades que se pueden evitar con vacunas son todavía hoy relativamente comunes. Si no se utilizaran las vacunas podrían volver a producirse epidemias de enfermedades evitables, lo cual causaría mayores niveles de secuelas, invalidez y muerte infantil.

Dra. Amelia Pérez España.

Pediatra.

Fuentes: Comité Asesor de Vacunas (CAV) (www.vacunasaep.org/) y Sociedad Española de Inmunología Clínica, Alergología y Asma pediátrica (SEICAP) (www.seicap.es)